miércoles, 6 de abril de 2011

LA ROMERÍA DE SAN ISIDRO


"Pradera de San Isidro"                                            "Romería de San Isidro"

La imagen de la semana se trata de la "Pradera de San Isidro" de Goya perteneciente al 1788, de estilo rococó. 

A diferencia del otro cuadro, "Romería de San Isidro"  también de Goya, muestra un ambiente mucho más festivo, alegre luminoso... es decir, el ambiente típico de un día festivo.
"Romería de San Isidro" en cambio, muestra una imagen totalmente opuesta a la que plasmó anteriormente en su otra obra pictórica.  En este cuadro, ya no intenta reflejar las costumbres de un día festivo madrileño ni intenta representar la imagen más acertada posible de la ciudad (como se puede apreciar al fondo de "la pradera de San Isidro") , ahora en cambio, refleja un grupo de personajes en la noche, ocuros, con rostro desencajado (feísmo) tal vez ebrios.

Goya experimentó un intenso cambio debido a la situación del momento; su pintura se vuelve más crítica, ya no muestra lugares idílicos y temas banales, sino la miseria, las clases sociales, la pobreza, la decadencia.  Sus pinturas tratan de mostrar ese pesimismo, esa tristeza mediante la pérdida del color entre otras cosas; su gama cromática se reduce a ocres, dorados, tierras, grises y negros y algún blanco; a su vez la pincelada se vuelve menos minuciosa y  más suelta.

Todo lo contrario al otro cuadro, pues pertenece a una época en la cual Goya no había pasado quizás por momentos decisivos de su vida.  Es totalmente distinto, muestra espacios diáfanos, colores brillantes, sensación de profundidad... en fin ambos cuadros representan el cambio descomunal que Francisco de Goya experimentó en su vida y como así lo quiso plamar en su pintura.

Actualmente ese lugar está totalmente integrado en la ciudad de Madrid.  La romería de San Isidro se celebraba en torno a la ermita de San Isidro, situado al otro ladro del Manzanares.
Ese día los madrileños salían de la ciudad y cruzaban el puente de Segovia provistos de panderos, guitarras y comida en abundancia.


Una vez en la ermita oían misa y besaban el cuerpo incorrupto del santo contenido en una urna.  A continuación bebían agua de la fuente de San Isidro, situada junto a la ermita.  Después disfrutaban de un algre día en convivencia.


1 comentario:

  1. jA, JA, JA... QUE PUNTO LA FOTO DE LA ROMERÍA...Muy bien llevada la entrada como siempre...sobre todo la descripción de las pinturas negras...

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